Marilyn. La última pasión

“MARILYN,​​ LA ULTIMA PASION” *          

NUEVE OBRAS CORTAS QUÉ CONFORMAN UN​​ ESPECTÁCULO​​ DE​​ José Simón Escalona.

 

PERSONAJES:

DEL MUNDO DE LOS MUERTOS:​​ LA​​ TÍA​​ OLIMPIA​​ 

LA​​ TÍA​​ CLARA

LA​​ TÍA​​ CHEPERO

EL​​ TÍO​​ CAMBURELLI

EL​​ TÍO​​ RAMÓN

EL​​ TÍO​​ CHIQUITO

 

DEL MUNDO DE ANGOSTURA:​​ 

LA FAMILIA:​​      EL PROFESOR

LA​​ ÚNICA​​ MUJER​​ 

LA HERMANA​​ 

EL NIÑO

 

DEL BARRIO BAJO DE SANTA ANA:​​  LA SAPOARA​​ 

AMBROSIO​​ 

LA SEÑA CONCHITA​​ 

 

DEL MUNDO​​ ARTÍSTICO

PERSONAJE PROTAGÓNICO:​​   EL DIRECTOR

 

PERSONAJES LITERARIOS:​​   EL ACOMPAÑANTE​​ 

EL AMANTE

 

DEL MUNDO DE LAS EVOCACIONES

COROS:​​      CORO DE BEATAS

CORO DE ENFERMERAS

CORO DE RUMBERAS DE CARNAVAL

CORO DE MODELOS DE "MONTREAL”*

 

IMÁGENES​​ Y DISFRACES:​​   SANTA ANA

CRISTO

FABIOLA​​ 

SYRA (ESCLAVA DE FABIOLA)

INÉS​​ (LUEGO SANTA,​​ PRIMA DE​​ FABIOLA)​​ 

UN SOLDADO ROMANO

NIÑO ANGELITO​​ 

NIÑA ANGELITO​​ 

UN CURA​​ 

BOLA DE NIEVE

 

OTROS ESPECTROS DEL PUERTO:​​  ​​​​  CALETEROS,​​ MARINEROS, BORRACHOS,​​ MARICAS​​ Y PROSTITUTAS.

 

LAS OBRAS:

OBRA PRIMERA:​​  "AQUÍ​​ ESTA EL PUBLICO"​​ 

OBRA​​ SEGUNDA:"LAS TRES​​ TÍAS"​​ 

OBRA TERCERA:"LOS TRES​​ TÍOS"

OBRA CUARTA:​​  "FABIOLA"

OBRA QUINTA:“DIALOGO PARA DOS AMANTES"​​ 

OBRA SEXTA:​​  "EL ULTIMO GRITO DE LA MODA”​​ 

OBRA​​ SÉPTIMA:​​  "SE APLICAN INYECCIONES”​​ 

OBRA OCTAVA:"SANTA ANA"

OBRA NOVENA:​​  "MARILYN, LA ULTIMA​​ PASIÓN"

 

EL ESCENARIO:

OBRA PRIMERA:​​ EL ESCENARIO REPRESENTA UN ESPACIO​​ ESCÉNICO​​ DE UN TEATRO DONDE SE HA CONVOCADO AL PUBLICO. UNA CALLE, UN PUEBLO, AL FONDO, COMO UNA​​ FOTOGRAFÍA, O COMO UN MURAL, EN DONDE SE ASOMAN LOS PERSONAJES QUE EN LA​​ IMAGINACIÓN​​ DEL DIRECTOR, LO DESCRIBEN EN SU​​ ESENCIA ANCESTRAL.

 

OBRA SEGUNDA:​​ EL​​ SALÓN​​ AMPLÍSIMO​​ DE UNA CASA DEL PUEBLO, EN​​ DONDE​​ ESTÁN​​ REUNIDAS LAS TRES​​ TÍAS, COMO FANTASMAS QUE VIGILAN A LOS HIJOS DEL PROFESOR QUE JUEGAN EN LA ESCENA.

 

OBRA TERCERA:​​ EL ESTUDIO DE RADIO​​ BOLÍVAR​​ DESDE DONDE EL​​ TÍO​​ CAMBURELLI SE DIRIGE EN SU PROGRAMA DOMINICAL A SU AUDIENCIA LOCAL. LA CASA DEL PROFESOR EN DONDE SE HA DADO CITA LA FAMILIA PARA ESCUCHAR EL PROGRAMA. UN FANTASMA MERODEA LA ESCENA, EL​​ TÍO​​ CHIQUITO, Él QUE NUNCA​​ NACIÓ​​ PARA VIVIR, SINO PARA MORIR.

 

OBRA CUARTA:​​ EL TEATRO RIO, DONDE SE REPRESENTA LA TRAGEDIA "FABIOLA" COMO PARTE DE UNA VELADA​​ PARA "RECOLECTAR​​ FONDOS”. EL ESCENARIO ES EL PALACIO DE FABIOLA EN ROMA, AÑO 302,​​ DESPUÉS​​ DE CRISTO.

 

OBRA QUINTA:​​ ANGOSTURA,​​ El PASEO A LA ORILLA DEL RIO. DESDE LA HABANA,​​ CUBA, BOLA DE NIEVE INTERPRETA LA DESPEDIDA.

 

OBRA SEXTA:​​ LA CASA DEL PROFESOR, LA CIUDAD SE HACE UNA PASARELLA TOMADA POR LAS MODELOS DE LA AFAMADA CASA DE ROPA FEMENINA “MONTREAL”.

 

OBRA​​ SÉPTIMA:​​ EL INTERIOR DE LA CASA DE​​ LA SEÑA​​ CONCHITA. LA CALLE DEL CALVARIO Y EL MONTE DONDE CRUCIFICARON A CRISTO.

 

OBRA OCTAVA:​​ LOS AMBIENTES DEL PUERTO DE​​ “SANTA ANA", ESPECIALMENTE EL BAR DE LA SAPOARA, EL CINE ROYAL, Y​​ LA CALLE DONDE SE​​ DESARROLLA​​ LA​​ PROCESIÓN​​ Y LUEGO LAS FESTIVIDADES CARNESTOLENDAS.

 

OBRA NOVENA:​​ UN ESCENARIO, EL MUNDO DEL TEATRO. UN ESPACIO​​ MÁGICO​​ DONDE APARECEN MUERTOS TODOS LOS ACTORES. ,

 

 

OBRA PRIMERA: "AQUÍ​​ ESTA EL PUBLICO”

 

EL ESCENARIO APENAS​​ ILUMINADO, UN FOCO INTENSO RESALTA​​ LA FIGURA​​ DEL DIRECTOR,​​ PRACTICA UN INTERMINABLE RETOQUE DE SUS LABIOS, EL​​ LÁPIZ​​ LABIAL REPASA Y DIBUJA MIL VECES SU BOCA. A VECES SE BORRA, INSATISFECHO DE LOS RESULTADOS, EL ROJO PURPURA DE LOS LABIOS Y VUELVE A COMENZAR LA TAREA.​​ 

EN LA ENTRADA DEL TEATRO, EL​​ ACOMPAÑANTE, CON AIRE MISTERIOSO RECIBE AL PUBLICO,​​ INDICÁNDOLE​​ CON GESTOS HACIA DONDE DEBE DISPONERSE.​​ TAMBIÉN​​ ESTA VESTIDO DE​​ RÍGIDA​​ ETIQUETA. PARECEN AMBOS ESTAR ARREGLADOS PARA UNA GRAN CEREMONIA SOCIAL.​​ 

CUANDO EL PUBLICO TERMINA DE LLENAR LA SALA, EL ACOMPAÑANTE CIERRA LAS PUERTAS Y SE DIRIGE HACIA EL CENTRO DEL ESCENARIO DONDE SE ENCUENTRA EL DIRECTOR.

 

ACOMPAÑANTE:​​  Señor Director.

DIRECTOR:​​  Sí.

ACOMPAÑANTE:​​  Aquí está​​ el público.

 

EL DIRECTOR DEJA SU TAREA DE DIBUJARSE LOS LABIOS.​​ CASI CON ASOMBRO Y SORPRESA MIRA EL​​ PÚBLICO. POR UN INSTANTE PARECE TEMERLE. DA LA ESPALDA AL PÚBLICO, EL ACOMPAÑANTE NO SE INMUTA.

 

DIRECTOR:​​  No quiero verlo.​​ ​​ 

ACOMPAÑANTE:​​  Debe​​ recibirlo.​​ 

DIRECTOR:Que salgan los actores.

 

EL ACOMPAÑANTE SE DIRIGE UN MOMENTO HACIA LOS ENTRETELONES, SE ESCUCHA UN CUCHICHEO DE NEGACIONES ENTRE CAJAS. EL ACOMPAÑANTE VUELVE AL ESCENARIO Y AL DIRECTOR.

 

ACOMPAÑANTE:Señor Director.

DIRECTOR:​​  ¿Qué?

ACOMPAÑANTE:  ​​​​  Reina la confusión. No era éste el comienzo del espectáculo.

DIRECTOR:No hay un espectáculo que ofrecer. Diles que vengan.

ACOMPAÑANTE:​​  Tienen miedo.

DIRECTOR:Tengo miedo.

ACOMPAÑANTE:​​  (HACIENDO ADEMAN DE SILENCIO) Shiiiiii!

DIRECTOR: ​​ ​​ ​​ ​​ ​​ ​​ ​​​​  Pero no es miedo de ustedes que están ahí.​​ (SE DIRIGE AL PUBLICO)​​ Están​​ aquí para esto: vernos sobre el escenario y al final dictar una sentencia. ¿Qué nos importan las sentencias de ustedes?

ACOMPAÑANTE:​​  ​​​​  (NUEVAMENTE HACE ADEMAN DE SILENCIO) Shiiiiiii!​​ 

DIRECTOR:Son menos importantes​​ que las de nosotros mismos. Ustedes no significan nada,​​ quizá la medida del éxito o del fracaso. Y eso, es tan poco importante​​ entre nosotros, se escapa y se​​ olvida con tanta facilidad, que está lejos de ser lo que buscamos. Ustedes no significan nada. Ahora,​​ podéis​​ salir del teatro.

 

SE CALLA. PAUSA TENSA.

 

ACOMPAÑANTE:​​  Señor Director

DIRECTOR.​​  Sí.

ACOMPAÑANTE:​​  ​​​​  Al​​ público no le gustan las amenazas.​​ Nunca quedan satisfechos.

DIRECTOR:​​  Tampoco lo estoy yo de ellos nunca. Jamás.

ACOMPAÑANTE:​​  ¿No es usted, acaso,​​ artista?

DIRECTOR:​​  ¿Qué es un artista, un​​ hombre?

ACOMPAÑANTE:​​  ¿No tiene respuesta?

DIRECTOR:No.​​ Aunque a veces pienso que es apenas un tumulto de recuerdos.

ACOMPAÑANTE:​​  Señor Director.

DIRECTOR:​​  ¿Qué?

ACOMPAÑANTE:El público bosteza.

DIRECTOR:​​  ​​  ¿Qué puedo hacer?

ACOMPAÑANTE:​​  ​​ Presentar un espectáculo,

DIRECTOR:​​  Déjame pensar en uno.

ACOMPAÑANTE:​​  No queda tiempo.​​ ¿Para qué pensar?

DIRECTOR:​​  Para que aparezcan los personajes.

ACOMPAÑANTE:​​  Están​​ ahí​​ y esperan impacientes.

DIRECTOR:Diles que salgan.

 

EL DIRECTOR SALE DE​​ ESCENA​​ AVERGONZADO. EL​​ ACOMPAÑANTE​​ SE DIRIGE HACIA​​ LA PUERTA DE LA SALA, LA ABRE​​ DE NUEVO, AHORA TIENE ENTRE SUS MANOS LA BATUTA DE UN DIRECTOR DE ORQUESTA.​​ 

COMIENZA LA MÚSICA DE UNA OPERA.​​ PUEDE SER “FAUSTO” DE GOUNOD. EL ACTO FINAL.​​ 

SE ABREN LAS PUERTAS DE LAS CASAS, EN UNA PUERTA APARECE "LA SAPOARA", EN OTRA, APARECEN LOS SEIS​​ TÍOS, EN UNA VENTANA APARECEN EL NIÑO Y LA NIÑA EN UN CUADRO FAMILIAR QUE COMPLETAN EL PADRE Y LA​​ ÚNICA​​ MUJER. EN OTRA PUERTA APARECE CONCHITA (EN LA QUE DICE​​ “SE APLICAN INYECCIONES”) Y​​ EN UNA ULTIMA APARECE AMBROSIO.​​ UN PERSONAJE LITERARIO, El AMANTE, CAMINA Y SE PASEA POR LAS CALLES DEL PUEBLO.

LOS PERSONAJES DEL RECUERDO DEL DIRECTOR SE HAN MATERIALIZADO EN ESCENA. AHORA SON UN CORO DE VOCES, ACOPLADAS, ACOPLADAS A LA​​ MÚSICA, CREAN UN AMBIENTE DE​​ ENSOÑACIÓN​​ QUE TIENDE HACIA EL PAROXISMO.​​ 

El ACOMPAÑANTE VA DIRIGIENDO SU ORQUESTA DE PERSONAJES,

 

TÍO​​ CAMBURELLI:​​  ¡Al teatro! Ha llegado la ópera.​​ Yo​​ mismo organizo la comparsa.

TÍA​​ CHEPERO:​​  Huele a guayabas, hay un olor de dulce en el aire que parece renacer con la brisa que viene del río.

TÍO​​ RAMÓN:¡No creo en los partidos!​​ Vivimos en un mundo amurallado de límites.​​ ¡Ha muerto la libertad!

TÍA​​ OLIMPIA:Esa habitación está plagada de encantos, es​​ como si en cada uno de los​​  ​​ ​​​​ frascos de esencias, de perfumes, se hubieran rezumado mis recuerdos.

TÍO​​ CHIQUITO:Todos​​ están recluidos en una soledad sin esperanzas. No conocen la alegría​​  ​​ ​​​​ de la muerte.​​ Aquí está la libertad del alma.

TÍA​​ CLARA:¡Somos todos unos hipócritas! Dios no se salva​​ de nuestra hipocresía.​​ ​​ ¡Cochinos, cerdos,​​ castradme el sexo para siempre!

LA​​ ÚNICA​​ MUJER:  ​​​​ Hijo, no te ensucies en la tierra, y sí vas a mirar el río, hazlo bajo la sombra.

EL PROFESOR:"Indocti discant et ament meminisse periti”.​​ (LOS IGNORANTES ​​ ​​​​ APRENDERAN Y LOS QUE SABEN RECORDARAN SIEMPRE CON AGRADO)​​ "Non schollae sed vite discimus”.​​ (NO ESTUDIAMOS EN LA ESCUELA SINO EN LA VIDA,​​ o​​ NO ESTUDIAMOS PARA LA ESCUELA SINO PARA LA VIDA)

LA HERMANA:Mamá, no quiero sentarme más en la celosía los domingos, se acercan niños negros​​ que tocan mis vestidos, y temo que algún día lo ensucien con su betún.

EL NIÑO:Hoy me acordé de mi pueblo, he visto a un ángel, y a un niño llevarse las manos a la cabeza:​​ un auto aplastó su pelota, que se me antoja como un huevo de tortuga disecado por el tiempo.

AMBROSIO:La primera mujer de cualquier oriental, siempre es una marica. Que me lo digan a mí, que le he quitado el virgo a más de un carajito en este pueblo de mierda.

LA SAPOARA:¡Pueblo de mierda! Voy​​ vengarme. Algún día seré​​ una artista de cine, para que todos​​ los​​ hombres en el Royal tengan que masturbarse mientras yo beso a un Hollywood maricón.

EL AMANTE:  El hombre es perfecto sólo en lo físico. Los caballos y los hombres. ¡Lorca!

ACOMPAÑANTE:​​  El pensamiento es infinito,​​ no se desgasta, estamos salvados.

TODOS:​​   (GRITAN)​​ ¡Aleluya!

​​ 

​​  OSCURO.

 

OBRA SEGUNDA: "LAS TRES​​ TÍAS”

EL​​ SALÓN​​ AMPLÍSIMO​​ DE UNA CASA DE PUEBLO, SOBRIA,​​ HAY​​ UNA RADIO EN EL SALÓN.​​ EN ESCENA SE ENCUENTRAN LAS TRES​​ TÍAS.​​ CHEPERO​​ EN UNA SILLA MECEDORA, ELLA ES COMO EL​​ PENDÓN​​ DE UN RELOJ ANTIGUO.​​ ES​​ CIEGA. LA​​ TÍA​​ CLARA, EN UN​​ RINCÓN, COMO SI SE OCULTARA DE LAS MIRADAS AJENAS CUENTA DINERO.​​ LA TÍA OLIMPIA LLENA​​ ALGUNOS FRASCOS CON​​ LÍQUIDOS​​ DE COLORES.​​ 

CERCANOS A LA​​ TÍA​​ OLIMPIA ESTÁN​​ LA HERMANA Y EL NIÑO;​​ LA HERMANA TIENE DISPUESTO​​ UN JUEGUITO DE TE DE​​ JUGUETE, EL NIÑO OBSERVA LAS ACCIONES DE LA HERMANA;​​ LA HERMANA​​ TIENE ALGUNAS MUÑECAS CON ELLA,​​ EL NIÑO NO TIENE NADA. LA HERMANA SE DISTRAE EN JUEGO CON LAS MUÑECAS.​​ 

CHEPERO SE DEJA LLEVAR POR EL​​ ÉXTASIS​​ DEL AMBIENTE, HAY CALOR Y ELLA SUAVEMENTE SE ABANICA.​​ CLARA SIENTE​​ SU ACOSTUMBRADO DOLOR DE CABEZA. DEJA SUS ACCIONES Y SE DIRIGE A UNA MESITA CERCANA A LA SILLA DE CHEPERO. CHEPERO AL SENTIRLA​​ PRÓXIMA,​​ DEJA DE ABANICARSE.​​ CLARA DESTAPA UNA​​ CAJA DONDE HAY HOJAS DE PARRA,​​ UNA POMADA DE OLOR PENETRANTE COMO EL ALCANFOR. CHEPERO​​ NO SE PARA NUNCA DE LA MECEDORA. CHEPERO APENAS SE INCORPORA​​ AL SENTIR LAS ACCIONES DE CLARA.

 

CHEPERO:​​  ¿La cabeza?

 

CLARA NO RESPONDE, BUSCA EN LA CAJA LAS​​ HOJAS DE PARRA. CHEPERO HABLA MIENTRAS CLARA SE​​ PONE​​ LAS HOJAS DE PARRA EN LAS SIENES.

 

CHEPERO:​​ Las hojas de parra te​​ aliviarán​​ el dolor. (ALCANZA LA CAJA QUE TIENE ALCANFOR) Y el alcanfor, con esa frescura, con ese olor que se pega de las sienes y del alma, te hará sentir sin dolores,​​ es​​ como una cataplasma que colocas en tu frente​​ y te olvidas de todo. De todo, Clara.

 

CHEPERO SE DA CUENTA QUE FASTIDIA A CLARA, PUES ELLA SE RETIRA DE SU LADO AGRIA, AMARGA, SE DIRIGE HACIA UNA ESQUINA DONDE COMIENZA A​​ ENROLLAR​​ BILLETES Y GUARDARLOS EN SU CORPIÑO, Y MAS LUEGO ENTRE LOS​​ RINCONES.

 

LA​​ ACCIÓN​​ PASA AL JUEGO DE LOS NIÑOS QUÉ​​ ESTÁN​​ ABSTRAÍDOS​​ DE LAS FANTASMALES​​ TÍAS.

 

LA HERMANA. -​​  ¡Los niños no juegan con muñecas!

 

EL NINO CORRE A UN​​ RINCÓN​​ DONDE​​ EL ACOMPAÑANTE LE ENTREGA UN OSITO​​ DE​​ PELUCHE, UN POCO VIEJO Y​​ RAÍDO. EL NIÑO​​ LLEGA HASTA DONDE ESTA LA HERMANA, BUSCA​​ PARTICIPAR DEL JUEGO. LA NIÑA​​ LO RECHAZA NUEVAMENTE.

 

LA HERMANA. -​​  No quiero a tu​​ osito. Huele mal, de tanto dormir contigo está empapado de orín y​​ no quiero que ensucie​​ a mis muñecas.

 

EL NIÑO EN VENGANZA SACA DE SU BOLSILLO UNAS​​ TIJERAS. LA​​ HERMANA AL VERLAS SE SIENTE ATERRADA Y PROTEGE A​​ SUS MUÑECAS. LE DICE CON MIEDO.

 

LA HERMANA:No les cortes el pelo a mis muñecas. Voy a contárselo a mamá, y después van a llevarte a casa de la Señá Conchita.

 

EL NIÑO CON TERROR SE SEPARA DE LA ESCENA. LA​​ NIÑA PEINA A LAS MUÑECAS.

LA​​ ACCIÓN​​ PASA A CLARA QUE HABLA DESESPERADA EN UN​​ RINCÓN​​ DEL ESCENARIO.

 

TÍA​​ CLARA:​​  Si en verdad se acabara el dolor, o se aliviara. No es la cabeza,​​ si supieran que no es la cabeza, pero cómo lo​​ digo sin ofender a Dios. Son​​ las piernas, el cuerpo, el sexo el que me duele de tanto ocio. Se me figura que mi vida es como la de una puta de "Santa Ana”: aquí está el dinero, aquí guardo el​​ dinero, entre los pechos; pero, ¿los hombres? ¿Dónde​​ se guardaron los hombres? ¿Dónde​​ se escondieron con ese maldito juego de la "ere" que no me​​ deja tocar a nadie.​​ 

 

EL NIÑO TIENE LOS OJOS VENDADOS, COMO EN EL JUEGO DE LA ERE, Y TRATA DE ALCANZAR A LA HERMANA QUE SIEMPRE SE ESCONDE, ELLA​​ SE​​ RÍE.

 

TÍA​​ CLARA:¿Y esas voces, esas risas? ¿Qué hago yo aquí sola? ¿Qué hago, qué? ¿Hacerme el estanque de mis amarguras? Soné con ellos, algún día hasta creí​​ que se acercaban a mí y me poseían entre sueños, entre esas malditas sábanas limpias, blancas como desiertos. ¡Qué sed! ¡Qué​​ largo es el tiempo entre este calor que no es de cuerpos!​​ Y luego la edad,​​ y el cansancio, y una aquí, sentada a la puerta de la Concordia todas las tardes calurositas de mayo, y de abril y de siempre. Y los niños, esos niños acercándose a mi puerta y mirándome con ese aire de lástima con que me miran. Y las otras mujeres preñadas​​ de hijos, y los​​ otros hombres, esos, los maricones hartos de sexo, pregonando sexo. Lo único que me hace sentir aliviada es saber que estoy lejos​​ del pecado, y que Dios me recibirá algún día entre sus brazos y ya no me dolerá la carne. Dios,​​ que aunque estoy muerta, no ha venido a tenderme la mano y salvarme de tantos dolores.

 

LA VOZ DE CLARA ES INTERRUMPIDA POR​​ UN RECUERDO​​ QUE HACE​​ REÍR​​ A CHEPERO, CON​​ ALEGRÍA.

 

TÍA​​ CHEPERO:​​  ¡Carajo! Ese Fito si le echa vaina a la maestra.​​ Anoche traía una borrachera que se arrastraba por la acera, y debajo del farol del frente de la casa de Fefa,​​ comenzó a gritarle que le diera sus reales, que él se había​​ jodido mucho para conseguirlos, el todo era que quería seguir tomando para terminar de emborracharse y acabar con​​ los centavos de la maestra.​​ 

 

LA​​ TÍA​​ OLIMPIA​​ INCRÉDULA​​ POR SU INOCENCIA,​​ RESPONDE AL CHISME DE CHEPERO. LE TRAE​​ UN FRESCO DE LOS SUYOS A CHEPERO.

 

LA​​ TÍA​​ OLIMPIA:No me digas, Chepero.

LA​​ TÍA​​ CHEPERO:​​  Lo peor es que Fefa salió con la correa en la mano y le cayó​​ a carajazos a Fito. Me contó esta mañana la maestra, que Fito se cagó en los​​ pantalones del vergajazo que le asentó.

 

RISAS FRESCAS DE CHEPERO Y​​ DE OLIMPIA QUE SE MEZCLAN CON LAS RISAS DE LOS NIÑOS QUE SE CUENTAN ALGO​​ CÓMICO.​​ COMO QUIEN ESTA MIRANDO ESCONDIDO UNA​​ ACCIÓN.

 

EL​​ NIÑO:  Mírale las bolas a Fito, parece que se le estuviera saliendo la cagalera.

LA​​ HERMANA:Con los correazos de la maestra a cualquiera se​​ le sale.​​ 

EL NIÑO:¿Viste? Tiene el pipí arrugadito.​​ (RÍEN)

 

TÍA​​ OLIMPIA LE ENTREGA EL FRASCO ENORME DE PERFUME A CHEPERO.

 

TÍA​​ OLIMPIA:¿A qué huele?

TÍA​​ CHEPERO:A recuerdos.

 

LA​​ TÍA​​ OLIMPIA SE RETIRA DE CHEPERO, VA HACIA DONDE SE ENCUENTRAN LOS HIJOS DEL PROFESOR.​​ 

 

TÍA​​ OLIMPIA:¿Qué miran?​​ 

EL NIÑO:  El río.

LA HERMANA:Mentira. Veía a Fito. Está bañándose desnudo.

 

LA​​ ACCIÓN​​ PASA A DONDE SE ENCUENTRAN CHEPERO Y CLARA. CHEPERO BUSCA CONVERSAR CON CLARA.

 

TÍA​​ CHEPERO: ​​​​  ¡Lo de Fito! ¿Supiste, Clara?​​ 

TÍA​​ CLARA:​​  Aquí siempre se sabe todo.

TÍA​​ CHEPERO:​​  ¡Qué vaina, mujer! Qué​​ vaina tener un hijo tan​​ viejo y vago como ese Fito de la maestra, y eso que no lo parió,​​ sino se le caga encima a la pobre maestra.

TÍA​​ CLARA:​​  Se​​ lo tiene merecido por pendeja, quién la mandó a criar muchacho ajeno. Yo no, carajo, yo ni me casé, ni salí a cuidarle carajitos a nadie.

 

LA​​ ACCIÓN​​ PASA HACIA DONDE ESTA OLIMPIA. PARECE HABER ESCUCHADO LAS VOCES DE CLARA. LOS HIJOS DEL PROFESOR​​ ESTÁN​​ CON ELLA, PERO AHORA COMO ESTATUAS, NO LA ESCUCHAN.

 

TÍA​​ OLIMPIA:​​ (CON EL DEJO DE TRISTEZA QUE LA CARACTERIZA)​​ Yo​​ , no tuve hijos, pero le cuidé los niños al profesor, mis sobrinos. Las malas lenguas me dijeron que no debía hacerlo por aquello de "a​​ quién Dios no le dá hijos, el diablo le​​ da​​ sobrinos". El Diablo me los​​ dio​​ y yo​​ fui​​ feliz;​​ por eso me mantuve peleada con Dios por el resto de la vida y se me ha escondido por el resto de la muerte. Construí aquel cuarto donde los niños jugaban, cuando murió mi marido. Lo llené con todo lo que quedó de la vieja pulpería;​​ después me dió por colmar frascos con líquidos de colores, y al no encontrar una explicación para mis sobrinos, me acordé de aquello que me había​​ dicho Chepero. Les inventé lo de las esencias. Porque eso significa​​ la​​ vida para mí, un puro invento.

 

LOS NIÑOS SALEN DE ESCENA, AHORA QUEDAN SOLAMENTE​​ LAS TRES​​ TÍAS, SOLAS Y AISLADAS.

 

TÍA​​ OLIMPIA:​​ (TRISTE)​​ Esa habitación está plagada de encantos, es como si en cada uno de los frascos de esencias, de​​ perfumes, se​​ hubieran rezumado mis recuerdos.

TÍA​​ CHEPERO:​​ (SOÑADORA) ¡Huele​​ a guayabas, hay un olor de dulce en el aire que parece renacer con la brisa que​​ viene del río.​​ 

TÍA​​ CLARA:​​ (AMARGA) ¡Somos todos unos​​ hipócritas! Dios no se salva de nuestra hipocresía. ¡Cochinos, cerdos,​​ castradme el sexo para siempre!

 

OSCURO.

 

OBRA TERCERA: "LOS TRES​​ TÍOS”

 

EN EL MISMO​​ SALÓN​​ ANTERIOR​​ SE ENCUENTRAN REUNIDOS ALREDEDOR DEL RADIO LAS TRES​​ TÍAS JUNTO A LA​​ ÚNICA​​ MUJER, ESPERAN ANSIOSAS EL PROGRAMA DOMINICAL DE CAMBURELLI. EN​​ UN​​ RINCÓN​​ DE LA CASA SE ENCUENTRA EL​​ TÍO​​ RAMÓN, SENTADO EN El MISMO MECEDOR DE LA​​ TÍA​​ CHEPERO, EN UNA SILLA PEQUEÑITA, DELANTE DE ÉL,​​ ESTA EL NIÑO. EN OTRO ANGULO, ENFRASCADO​​ EN LECTURAS Y ANOTACIONES, SE​​ ENCUENTRA SILENCIOSO EL PROFESOR.​​ 

UN FANTASMA SOLITARIO MERODEA EL SALÓN, EL​​ TÍO​​ CHIQUITO, QUE PARECE NO SER INVITADO A LA​​ REUNIÓN​​ FAMILIAR.​​ 

EN UN ANGULO SUPERIOR, DISTINGUIMOS EL​​ ESTUDIO DE “RADIO ANGOSTURA".​​ EL​​ TÍO​​ CAMBURELLI SE ENCUENTRA​​ DELANTE DEL MICRÓFONO POR EL CUAL​​ SE DIRIGE A SUS RADIOESCUCHAS, A SU LADO ESTA LA HERMANA,​​ UN POCO NERVIOSA.

LA SAPOARA​​ EN LA PUERTA DEL BAR, TAMBIEN ESCUCHA LA RADIO.

 

TÍO​​ CAMBURELLI:​​ Desde su Radio Angostura, la voz de la cultura,​​ están​​ sintonizando ustedes el programa dominical​​ de Camburelli, para todo el público de Venezuela​​ y la inmensa colonia italiana. (EN PERFECTO ITALIANO) Italia, 0 patria, degna di trionfal fama,​​ il bel paese ch'Appennin parte e 'l mar circonda​​ e Alpe. Italia, Italia, Magna parens "opera". (ITALIA, OH, PATRIA,​​ DIGNA DE TRIUNFAL RENOMBRE,​​ EL BELLO PAIS QUE LOS APENINOS CORTAN Y EL MAR Y​​ LOS ALPES CIRCUNDAN. ITALIA, ITALIA, GRAN MADRE DE LA OPERA). Hoy tenemos la oportunidad especialísima de presentar a nuestro público de Guayana, una voz que helará el caudal​​ del Orinoco. Una estrella, la​​ voz infantil de la hija del profesor y sobrina mía.

 

EL​​ TÍO​​ CAMBURELLI PONE UN DISCO DE APLAUSOS, LE INDICA A LA NIÑA EL​​ MICRÓFONO.

 

LA HERMANA:(TÍMIDA)​​ ¡Gracias,​​ muchas gracias por los aplausos!

 

LA FAMILIA EN LA CASA ESTA EXTASIADA EN ESCUCHAR LA VOZ DE LA NIÑA POR LA RADIO.

LA SAPOARA​​ HABLA DESDE SU PUERTA.

 

LA SAPOARA:¡La hija del Profesor!​​ Si me dieran a mí la oportunidad​​ ​​ que tendrían vedette para rato. Se acabaría la Tongolele; me llamarían, la tembladora del Orinoco, La zamura de Angostura, la laja de la sapoara.​​ ¡La sapoara, pués, la sapoara para el​​ mundo!​​ 

 

SIGUE LA​​ CONVERSACIÓN​​ EN LA RADIO.

 

TÍO​​ CAMBURELLI:​​ ¿Qué nos vas a interpretar en este debut?

LA HERMANA:​​  ​​ Una canción que está muy de moda.

TÍO​​ CAMBURELLI: ​​ El público del estudio de Radio Angostura, la voz de la cultura,​​ aplaude tu triunfal brinco a la fama. (PONE EL DISCO DE APLAUSOS QUE CAMBIA​​ RÁPIDAMENTE​​ POR LA PISTA)​​ Música maestro.

 

SE ESCUCHA LA​​ MÚSICA​​ DE LA​​ CANCIÓN: "EL​​ PÁJARO​​ CHAGÜI" DE NESTOR ZAVARSE.​​ 

LA NIÑA LO​​ INTERPRETA, AL FINAL DE LA​​ CANCIÓN,​​ LA MADRE LLORA DE​​ EMOCIÓN, TODOS APLAUDEN.​​ 

TAMBIÉN​​ HAY DISCO DE APLAUSOS.

 

TÍO​​ CAMBURELLI:​​ La han oído. Oh, voz bellísima,​​ di grande virtute ornata.​​ ¿Qué​​ quieres​​ responder​​ al público que tan calurosamente te ha recibido?

HERMANA:Que estoy muy emocionada.

TÍO​​ CAMBURELLI:​​  Pequeña, tú en este momento eres una guía para​​ los niños de este pueblo, un ejemplo de virtudes, una gran estudiante, una artista.​​ ¿Cuáles son tus aspiraciones, qué​​ quieres ser cuando seas grande?​​ 

HERMANA:¡Mi mayor aspiración, lo que quiero ser cuando​​ crezca!​​ Lo que más quiero en el mundo es ser... ¡Adeca!

 ​​​​ 

EN LA CASA SE CELEBRAN LA OCURRENCIA MIENTRAS EL​​ TÍO​​ RAMÓN​​ MONTA EN​​ CÓLERA​​ AL ESCUCHAR ESTO.

 

TÍO​​ RAMÓN: (FURIOSO) ¡Adeca!​​ ¡Adeca! Qué sabe una niña lo que es ser adeca. No señor, es un descaro​​ que le inculquen ser adeca a esa niña.​​ (AL NIÑO) Y​​ ​​ escúchame bien,​​ ​​ que eres la posibilidad del mañana: no se puede creer en los partidos. Todos son iguales.​​ No se puede tener filiación partidista, no se​​ puede creer en la política. ¿Para qué ha servido​​ el progreso social sino para​​ negar al hombre como individuo?​​ La​​ moral es un asunto ético personal, es la libertad y el mismo individuo, por lo tanto amplísima e imposible de sostener en normas de moral pública. Vivimos en un mundo amurallado de límites. ¡Ha muerto la libertad.

 

EL​​ TÍO​​ CHIQUITO CON​​ IMPACIENCIA INTERRUMPE LA​​ CONVERSACIÓN​​ DEL​​ TÍO​​ RAMÓN, PERO LE HABLA A ÉL,​​ NO​​ AL NIÑO QUE ESTA ABSTRAÍDO PENSANDO EN LAS PALABRAS​​ DE​​ RAMÓN. ÉL NO PUEDE COMUNICARSE CON EL​​ TÍO​​ CHIQUITO.

 

TÍO​​ CHIQUITO:Es cierto, allá entre los hombres no hay libertad: todos están recluidos en una soledad sin esperanzas. No aprendieron nunca a construir sentimientos de solidaridad.​​ Pero aquí sí,​​ Ramón. No olvides decirle que aquí entre los muertos existe la solidaridad porque todos somos iguales. Háblale​​ de la muerte, de la felicidad de la muerte.​​ No hay miedo en la muerte.

TÍO​​ RAMÓN:Yo no tengo miedo de la muerte como no lo tuve nunca de la vida, es lo mismo, todos los seres humanos están muertos en vida.

TÍO​​ CHIQUITO:​​  La​​ muerte da un sentido a la vida. Yo nací para morir y conozco la alegría de la muerte.

TÍO​​ RAMÓN:¡Morimos como hemos​​ vivido, sin motivos, porque si!

TÍO​​ CHIQUITO:​​ ​​  ¡Es un niño,​​ RAMÓN!

TÍO​​ RAMÓN:¡Crecerá y necesita aprender!​​ Tú no creciste nunca y no sabes nada de la vida.

TÍO​​ CHIQUITO:¡Los he oído!​​ Los oigo hablar constantemente de sus viditas y he aprendido. Es cierto que no viví, afortunadamente no alcancé ni un sólo segundo de la vida porque ese sólo tuve que compartirlo con la muerte, algo que me condenó a una urna blanca y pequeñita.​​ Pero ha sido una condena sólo en lo​​ físico. El poco espacio apretujó el desarrollo de mis miembros, pero no el de mi alma.

TÍO​​ RAMÓN:El alma es la moral, y la moral la integridad. No somos íntegros, el hombre no puede ser totalmente libre, lo condiciona una moral ajena.

TÍO​​ CHIQUITO:​​ (DESESPERÁNDOSE)​​ Una moral​​ que no existe entre los muertes.

TÍO​​ RAMÓN:​​ Existe una peor aún, somos cautivos al mismo tiempo de nosotros mismos, de​​ nuestro pensamiento, de lo que somos. Morimos como vivimos.​​ Aquí estoy yo reducido a una mueca de impotencia y conformismo.​​ (SE DIRIGE AL NIÑO) No persigas la libertad, no​​ te serviría de nada, aunque la tuvieras apretada entre tus manos no sabrías construir nada con ella, sería inútil.

TÍO​​ CHIQUITO:(PROTESTANDO​​ FURIBUNDO) ¡Es mentira! Mentira.​​ Dile que existe el alma, dile que el hombre también es alma y salvación, y que aquí entre los muertos está la libertad del alma.

EL NIÑO: ​​ (AL​​ TÍO​​ RAMÓN)​​ Tío​​ Ramón, háblame del tío chiquito.

TÍO​​ RAMÓN:¡No existe!​​ Algo que no es tangible no existe. Un hombre que no vivió no existe,​​  ​​ ​​ ​​​​ y aquí entre los muertos, solo nos conocemos los vivos.

 

EL​​ TÍO​​ RAMÓN​​ SALE DE ESCENA, EL​​ TÍO​​ CHIQUITO QUEDA A SOLAS CON​​ EL NIÑO EN ESCENA, El​​ TÍO​​ CHIQUITO INTENTA COMUNICARSE CON EL NIÑO, LO BUSCA, PERO​​ El NIÑO NO PUEDE VERLO, SE SIENTE SOLO Y SE DIRIGE HACIA LA RADIO, LA ENCIENDE. SE ESCUCHA​​ EN OFF​​ LA VOZ DEL​​ TÍO​​ CAMBURELLI QUÉ SE DESPIDE. COMIENZA A IRSE​​ LA LUZ DE ESCENA MIENTRAS SE ESCUCHA LA VOZ DE CAMBURELLI.

 

TÍO​​ CAMBURELLI:​​ (EN OFF)​​ Despedimos nuestro programa de hoy:​​ "Ecos de la antigua Roma",​​  escrito, dirigido, producido, musicalizado​​ y presentado por el gran​​ Camburelli,​​  con una invitación extensiva a toda la familia por lo sano​​ y constructivo del acto:​​  La Velada Artístico Cultural que presentan las Hijas de María de​​ la iglesia de​​  Santa Ana y bajo la dirección​​ del reverendo padre Machín. La tragedia clásica​​  "FABIOLA" del distinguido Cardenal​​ Nicolás​​ Wiseman.​​ ¡Al teatro, señores! ¡Id,​​  al teatro!

 

SE ESCUCHA​​ MÚSICA​​ DE OPERA.​​ 

OSCURO.

 

OBRA CUARTA: "FABIOLA"

EL​​ SALÓN​​ DEL PALACIO DE FABIOLA EN ROMA, AÑO​​ 302,​​ DESPUÉS DE CRISTO.​​ 

FABIOLA​​ ENGREÍDA, RECOSTADA CON UN ESPEJO DE PLATA EN UNA MANO, Y EN LA OTRA UNA DAGA.​​ SU ESCLAVA SYRA, LA PEINA.

​​ 

FABIOLA:​​  Cansada de este encierro, de esta soledad, harta de los libros y de mí misma.

SYRA:   ​​​​ Hay una manera nueva de salvarse.

FABIOLA:​​    ​​​​ ¿Cuál?

SYRA:​​  ​​ ​​ (CON​​ MIEDO Y​​ PENA)​​ El​​ Cristianismo.

FABIOLA. -  ​​​​ (FABIOLA​​ IRÓNICA)​​ El​​ Cristianismo, secta materialista, grosera y vulgar.

SYRA:​​    ​​​​ No conoce​​ sus fundamentos.

FABIOLA: Lo​​ desprecio demasiado para ocuparme en tales cosas. Prefiero vivir el paganismo, sus dioses, sus vicios, sus fábulas, sus idolatrías. No​​ creo en nada más allá de​​ ésta​​ vida, esta​​ vida pensada para gozar de sus delicados placeres. (FABIOLA AGARRA A SYRA, LA ATRAE HACIA SÍ, LA BESA) Lo único que aborrezco y menosprecio de esta sociedad pagana, es la frivolidad de los jóvenes que me prodigan con aduladores obsequios y que no logran divertirme con sus necedades. (SE ACERCA NUEVAMENTE A SYRA)​​ Pero tú, Syra, dime qué deseas por satisfacer mis ansias, háblame de tus virtudes y halágame con tus versos.​​ 

SYRA:​​ (SERIA)​​ Yo nada deseo, noble señora, a excepción de que seáis muy feliz;​​ no tengo nada de que vanagloriarme; y si quieres oír mis versos no hago otra cosa que cumplir con mi deber.

FABIOLA:(MOLESTA) Se me figura que no eres muy dada a conceder​​ elogios, porque jamás se te oyen palabras de adulación.

SYRA:¿Y qué​​ valor​​ tendrían en labios de una pobre esclava y dirigidas a una dama insigne, acostumbrada a​​ oírlas​​ a cada instante de labios finos y elocuentes? ¿Acaso las creéis cuando son otras quienes os las dicen y no las despreciáis cuando proceden de una esclava?

FABIOLA:(CON IRA)​​ ¿Pero es que aún ignoras que me perteneces y que tu obligación es servirme como me plazca? Tanto tu lengua como tus manos, como todo tu cuerpo, están a mi servicio; y quieras o no, harás lo que yo te​​ mande. ¿Cómo has podido imaginar que una esclava tuviera otros deseos que los de su dueña cuando ni siquiera su vida le pertenece?

SYRA:​​ (DIGNA)​​ En todo lo que decís debo daros la razón.​​ Sin embargo, hay algo que poseo y​​ sobre lo cual no podéis ejercer vuestro dominio.

FABIOLA:​​  ¿Puedes decirme qué cosa es esa?

SYRA:​​  El alma.

FABIOLA:  ​​​​ (IRACUNDA)​​ ¡El alma! ¿Qué quieres significar con esa extraña palabra?

SYRA:Solo os diré que es algo que mora en mí, que huye de la muerte y de todo aquello que se relacione con ella. Aborrece por tanto la adulación y la mentira, ya que abren el camino de la falsedad y de la ruina.

FABIOLA:​​  ¿Dónde​​ te han enseñado esas tonterías? En mis años de estudio he podido convencerme de que todas esas ideas de una existencia espiritual son charlatanerías de poeta y no tengo por menos que despreciarlas. ¿Te atreves de veras a creer que cuando tu cadáver vaya a​​ reunirse con los de los demás esclavos, muertos de embriaguez o a causa de azotes, tú resucitarás y volverás a nacer en otra vida de gozo y de entera libertad?

SYRA:Así es, señora mía. Creo aún más: me propongo sobrevivir a todas esas calamidades. Después de​​ la muerte mi​​ cuerpo volverá a la vida; y no para ser esclavo vuestro, ni de ninguna otra persona, sino que,​​ libre y gozoso, poseerá la felicidad y la dicha eterna.

FABIOLA:​​  Esas extrañas creencias, propias de una imaginería popular como​​ la tuya, te inutilizan para desempeñar tus tareas;​​ es preciso librarte de ellas. Cómo puedes imaginar siquiera que en esa soñada vida futura tú puedas ser igual e incluso superior a mí.

SYRA:  Noble señora, sois superior a​​ ​​ en autoridad,​​ en instrucción, en ingenio. También en​​ hermosura,​​ en gentileza y en elegancia de vuestros movimientos;​​ pero si os he de hablar con sinceridad, como me lo habéis ordenado, he de deciros que una pobre esclava poseedora de un espíritu inteligente y activo, llamado a la eternidad,​​ a la habitación permanente de los cielos, y cuyo modelo es la misma divinidad,​​ ¿no ha de considerarse superior a aquellas gentes que tienen por toda fortuna los dones insignificantes de este pobre mundo?

 

FABIOLA, REPRENDIDA Y HUMILLADA POR LA ESCLAVA, MONTA EN​​ CÓLERA, ESTALLA EN UN ARREBATO DE IRA Y TOMANDO LA DAGA SE ARROJA SOBRE SYRA CON ANIMO DE HERIRLA. LA ESCLAVA SE PROTEGE EL PECHO CON EL BRAZO,​​ RECIBIENDO LA AFILADA PUNTA DE LA DAGA​​ ABRIÉNDOLE​​ UNA HERIDA PROFUNDA.​​ 

SUENA UNA​​ MÚSICA​​ CELESTIAL​​ Y SE APARECE LA IMAGEN DE SANTA​​ INÉS, EN VIDA PRIMA DE FABIOLA. FABIOLA AL VERLA CAE EXTASIADA.

 

FABIOLA:​​  ¡Inés! Prima mía,​​ Inés, ¿cómo has regresado aquí de entre los muertos?

SYRA:​​ (GRITANDO ENTRE EL DOLOR) ¡Milagro! ¡Milagro!​​ Es una Santa, es la aparición de Santa Inés.​​ 

 

LA SANTA BROTA SANGRE DE SU SENO.​​ 

 

FABIOLA:​​   Pero, ¿qué tienes ahí,​​ qué brota de tus​​ tetas? Es sangre.​​ 

SYRA:​​  (HISTÉRICA) Ha curado mi herida.​​ ¡Milagro!​​ 

SANTA​​ INÉS:(MÍSTICA)​​ ¡Es sangre!​​ La única joya que me adorna. Sangre de una criatura humana; y si Dios es nuestro Padre, debemos considerarla como una hermana.​​ 

FABIOLA:​​  ¡Una esclava hermana mía!​​ No son más que nuestras propiedades, como cualquier otra cosa.​​ 

SANTA​​ INÉS:​​  Fabiola, voy a pedirte algo.

FABIOLA:(EXTASIADA) Pídeme lo que quieras, prima y santa.​​ Tu aparición me ha convertido al​​ Cristianismo, eres​​ , eres tu mi prima Inés que viene desde los cielos convertida en Santa.​​ 

SANTA INES:​​  Debes amar a tu esclava. Tuya es, pero a​​ través​​ del amor prodigado por Cristo, hijo de Dios.​​ 

 

FABIOLA ABRAZA A SYRA, SYRA SE ENTREGA​​ A ELLA.​​ AMBAS SE AMAN, EN UN ACTO CARNAL. LA SANTA GRITA.​​ 

 

SANTA​​ INÉS:​​  ¡Te has salvado, Fabiola! ¡Te has convertido​​ al​​ Cristianismo!​​ ¡Aleluya! ¡Aleluya!

 

SUBE LA​​ MÚSICA​​ MÍSTICA​​ AL​​ CLÍMAX.​​ 

OSCURO.

 

OBRA QUINTA: "DIALOGO PARA DOS AMANTES”​​ (Lecciones para un despecho)

 

LA CALLE ESTA DESIERTA, ES UNA VEREDA ANGOSTA Y EMPINADA CASI COMO UNA MURALLA QUE​​ TERMINA EN UN​​ MIRADOR.​​ EN LA​​ SOLEDAD DE LA TARDE, SENTADOS EN UN BANCO, SE ENCUENTRAN​​ LOS DOS AMANTES: EL DIRECTOR Y ARTURILLO.

LA​​ CONVERSACIÓN​​ ES APENAS PERCEPTIBLE PARA LOS​​ OÍDOS​​ DE LOS CURIOSOS. EL DIRECTOR Y ARTURILLO MIRAN SIEMPRE HACIA ADELANTE. AMBOS VISTEN CORRECTAMENTE, MUY FORMALES. EL TRAJE DE ARTURILLO ES GRIS.

SE ESCUCHAN CINCO CAMPANADAS QUE VIENEN DE LA​​ IGLESIA.

 

DIRECTOR:​​  ​​ ¿Escuchas las campanas?

ARTURILLO:​​  ​​ Sí.

DIRECTOR:​​  ​​ Como cinco cuchillos.

ARTURILLO:​​  ​​ ¡Ay!

DIRECTOR:​​  ​​ Como cinco martillazos.

ARTURILLO:​​  ​​ ¡Ay!

DIRECTOR:​​  ​​ Como cinco gones que despiertan la noche en que te descubriré desnudo.

ARTURILLO:​​   ​​​​ No quiero estar desnudo.

DIRECTOR:​​  Hoy no...​​ 

ARTURILLO:​​  Ni mañana.

DIRECTOR:​​  ¿Y algún amanecer?

ARTURILLO:​​   ​​​​ No lo sé.

DIRECTOR:​​  Déjame verte desnudo esta tardecita de mayo.

ARTURILLO:​​   ​​​​ ¡No!

DIRECTOR:   ​​​​ Déjame verte desnudo esta última tarde de mayo.

ARTURILLO:​​   ​​​​ ¡No!

DIRECTOR:  ​​​​ (DESPUÉS​​ DE UNA PAUSA) ¿Volverás?

ARTURILLO:​​  ​​​​   ​​​​ Y me sentaré a tu lado en un banquillo de la plaza.

DIRECTOR. -​​   ​​​​ ¿Cómo en este crepúsculo?

ARTURILLO:​​   ​​​​ Y vendré vestido de blanco.

DIRECTOR. -​​   ​​​​ ¿No más de gris?

ARTURILLO:​​   ​​​​ No.

DIRECTOR:​​  ​​ Ya no de gris.​​ Fue​​ todo hace tanto tiempo.

ARTURILLO:​​   ​​​​ (SONRÍE​​ AMABLE) Yo lo descubrí apenas ayer.

DIRECTOR:​​  ​​ No debiste mirarlo.

ARTURILLO:​​   ​​​​ Estaba entre tus cosas. (SE LEVANTA) ¿No estoy​​ igual que en el retrato?

 

ARTURILLO SACA DE SUS BOLSILLOS UN LIBRITO DE PRIMERA​​ COMUNIÓN​​ Y UNA VELA BLANCA,​​ IDÉNTICAS​​ A LA​​ APARICIÓN​​ EN OTRO PLANO DEL NIÑO PREPARADO PARA LA PRIMERA​​ COMUNIÓN, AL IGUAL QUE LA NIÑA, ACOMPAÑADOS DEL PADRE Y DE LA​​ ÚNICA​​ MUJER.​​ 

TAMBIÉN​​ OBSERVA​​ LA ESCENA EL​​ ACOMPAÑANTE.​​ 

EL AMANTE Y El NIÑO LLEVAN​​ ADEMÁS​​ DE LA VELA UN ROSARIO PEQUEÑITO, UNOS GUANTES​​ Y UN LAZO EN EL BRAZO DE PRIMERA​​ COMUNIÓN, LOS ZAPATOS SON GRISES.​​ 

ESTA ENTRADA DE PERSONAJES ES ACOMPAÑADA POR UNA​​ MÚSICA​​ NOSTÁLGICA. TRISTE.​​ LENTÍSIMA.

 

ARTURILLO:​​ (MIRANDO SUS ZAPATOS)​​ También​​ los zapatos san grises.

DIRECTOR:​​ (VOLTEANDO LA MIRADA) Arturillo.

ARTURILLO:​​  Pensé que ibas a estar alegre, y​​ reír.

DIRECTOR:​​   No puedo hacerlo.

ARTURILLO:​​ (APENADO)​​ Es tan difícil hacer algo al atardecer.

DIRECTOR:​​   ¿No quieres estar aquí?

ARTURILLO:​​  Estas triste.

DIRECTOR:​​ (RÁPIDO) No. (PAUSA,​​ FALSAMENTE ALEGRE) Sólo que no quiero verte vestido​​ así.​​ ¿De qué sirven los recuerdos?

 

LOS PERSONAJES QUE​​ HABÍAN​​ ENTRADO SALEN, LA​​ MÚSICA​​ COMIENZA A BAJAR NUEVAMENTE.

 

ARTURILLO:  Quiero​​ oírte​​ hablar de tus recuerdos,

DIRECTOR:​​ Y yo quiero verte desnudo, a​​ través​​ del espejo, o mejor, a través de tus ojos. Tus ojos color de miel y de tirón.​​ (RÍE,​​ HABLA ALEGRE, RECORDANDO SIN TRISTEZAS, COMO​​ EN UN CUENTO)​​ Un tirón como el que vendía el portugués de la bodega de la esquina en la calle larga de Angostura. (RECORDANDO) Arturo, también se llamaba​​ Arturo. Me gustaba ir y ver el frasco enorme que llenaban de tirones, y se hacía agua​​ mi boca, y se hacían blandos. Los tirones de azúcar y papelón por el calor. Ahí estaban, sólo nos separaban el cristal de los frascos bocones. Y un día no resistí, rompí el frasco y corrí​​ hasta mi balcón de piedras con los tirones en las manos, y los templaba entre mis labios y mis dedos, se estiraban hasta que se​​ hacían​​ unos finos hilos de caramelo igual que tus cabellos. Yo miraba el río que parecía un​​ espejo bajo la resolana, el río, ancho y fuerte como tu cuerpo, voraz y huidizo como​​ ​​ deseo.​​ Y miraba llegar las chalanas remolcadas mientras sin pensar chupaba mi caramelo.​​ Las chalanas que llegaban al puerto y donde trabajaban los hombres...

 

ARTURILLO QUE SE SABE DE MEMORIA EL CUENTO, YA LO ADIVINA, CORTA AL DIRECTOR.

 

ARTURILLO:​​  ¡Los caleteros!

DIRECTOR:​​   Si, los​​ caleteros. Y podía ver la vida.

ARTURILLO:  Y podía ver la muerte.

DIRECTOR:Los caleteros semidesnudos que sudaban mientras​​ cargaban y descargaban la vida y la muerte, las ilusiones y el olvido.

ARTURILLO:(REPENTINO) ¡Quiere viajar en lancha!

DIRECTOR:  No.

ARTURILLO:  Quiero viajar a través del rio.​​ 

DIRECTOR:  ¡No te vayas!

ARTURILLO:  Me queda poco tiempo, son casi las cinco de la tarde.

DIRECTOR:  Ven, no te vayas y abrázame.

ARTURILLO:  Ya es tarde y solo queda un pasaje en la chalana que viaja por el rio.

DIRECTOR:  Abrázame y bésame.

ARTURILLO:  No quiero perder el último puesto.

DIRECTOR:  Quédate conmigo.

ARTURILLO:  ¿Qué me ofreces?​​ 

DIRECTOR:Puedo llevarte en las tardes a los malecones del​​ rio. Puedo llevarte en curiara​​ hasta Soledad.​​ 

ARTURILLO:  Es muy triste.​​ No quiero.

DIRECTOR:  Puedo llevarte en las noches al cine del puerto.

ARTURILLO:  Es muy feo, y tampoco quiero.

DIRECTOR:  No te vayas.

ARTURILLO:  Sólo queda un puesto en el​​ ferri​​ y es el mío.

DIRECTOR:  ¡Arturillo!​​ ¡Arturillo!

 

ARTURILLO SE HA IDO, EL DIRECTOR QUEDA SOLO EN ESCENA,​​ AMAGA DETENERLO, PERO YA ARTURILLO DESAPARECE.​​ 

EL ACOMPAÑANTE ENCIENDE LA RADIO. APARECEN EN LA RADIO EL​​ CUADRO FAMILIAR, PADRE,​​ ÚNICA​​ MUJER, HERMANA, NIÑO,​​ TAMBIÉN​​ LOS SEIS​​ TÍOS.​​ 

APARECE DESDE LA HABANA, CUBA, BOLA DE NIEVE, QUE INTERPRETA EL BOLERO: "VETE DE MI”.

OSCURO.

 

OBRA SEXTA: "EL ULTIMO GRITO DE LA MODA”

 

AMBROSIO CAMINA TONGONEÁNDOSE POR LAS CALLES, SE ESCUCHAN EN OFF LAS VOCES ACUSADORAS,​​ A LAS QUE AMBROSIO PARECE NO IMPORTARLE. AMBROSIO PORTA UNA MALETA.

 

VOCES EN OFF:​​  ¡Marica!​​ ¡Marica!​​ ¡Marica!​​ 

 

AMBROSIO MIRA AL PUBLICO, LE PARECE RECONOCER QUE​​ LAS VOCES VIENEN DE ÉL, SE ACERCA AL PUBLICO.

 

AMBROSIO: ¡Marica!​​ ¿​​ me llamas marica?​​ (A ALGUIEN DEL PUBLICO) Ah, mujer pendeja, pregúntale a tu hijo​​ si no tengo el culo más sabroso que cualquier vagina​​ zoqueta​​ por ahí.

VOCES EN OFF:​​  Mentira. Lengua viperina.​​ Todas las maricas son​​ iguales. Marica. Marica. Marica.

AMBROSIO:(RECIO) Yo​​ , mi​​ amor. Marica. Marica y a​​ mucha honra. Yo me cojo cualquier​​ cuca que se me resbale y​​ doy mi culo​​ cuando me enamoro. 0.K. Darling.

 

AMBROSIO LLEGA​​ A LA CASA DEL PROFESOR, TOCA LA PUERTA.

LAS LUCES SE ENCIENDEN EN LA SALA DE LA​​ CASA DEL PROFESOR. LOS NIÑOS SENTADOS LEEN SUS RESPECTIVOS LIBROS.​​ LA ESPOSO DEL PROFESOR​​ REVISA​​ UN​​ ÁLBUM​​ DE​​ FOTOGRAFÍAS.​​ EL PROFESOR, ENFRASCADO EN SUS ANOTACIONES. CUANDO ESCUCHAN EL SONIDO DE LA​​ PUERTA HAY UNA​​ TENSIÓN​​ FUERTE.​​ 

 

EL PROFESOR:​​  ¿Quién puede ser?​​ 

LA​​ ÚNICA​​ MUJER:​​ (NERVIOSA) Alguna visita.

EL​​ PROFESOR:Alguna visita que no respeta la hora de la siesta.​​ 

LA​​ ÚNICA​​ MUJER:​​ Debe ser un vendedor.

EL PROFESOR:No abras.

LA​​ ÚNICA​​ MUJER:​​ (MÁS NERVIOSA) ¡Es Ambrosio!

 

HAY SILENCIO EN EL PADRE, LA MADRE ABRE LA PUERTA Y ENTRA AMBROSIO COMO QUIEN ENTRA A UN ESCENARIO.​​ 

 

AMBROSIO:​​  ¡Soy Ambrosio!​​ ¡El último grito de la moda! Los modelos para el verano de la​​ afamada casa de ropa​​ femenina "Montreal".

 

SE ESCUCHA UNA​​ MÚSICA​​ DE DESFILE DE MODA. INMEDIATAMENTE COMIENZAN A APARECER UNA DOCENA DE MODELOS (HOMBRES Y MUJERES), TODOS COMO EN UNA PASARELA, DESFILAN SUS VESTIDOS. EL PROFESOR Y LA​​ ÚNICA​​ MUJER OBSERVAN​​ IMPÁVIDOS. IGUALMENTE LA HERMANA. EL NIÑO TOMA​​ LÁPIZ​​ Y PAPEL,​​ COMIENZA A HACER UN DIBUJO.

MIENTRAS SE DESARROLLA LA​​ ACCIÓN​​ DEL DESFILE DE​​ MODAS, AMBROSIO SE EMPEÑA EN CONTAR​​ PÍCARAMENTE​​ Y EN TONO DE CHISME,​​ UN CUENTO. MIENTRAS TANTO, ESE CUENTO ES APENAS INTERRUMPIDO POR LAS VOCES DEL PROFESOR Y LA​​ ÚNICA​​ MUJER.

 

AMBROSIO:​​  Se enteró ya​​ que la hija del Gobernador se casa con un mecánico. Resulta que la niña está preñada;​​ me enteré​​ por la Señá Conchita, fue llamada para atender​​ a la muchacha, y ésta entre mares de lágrimas le confesó que había metido la pata, imagínese usted, una muchacha de la alta sociedad casada​​ con un pata en el suelo, yo sabía que​​ ahí había algo​​ raro, como​​ iba el gobernador a​​ aceptar ese matrimonio tan horrible de su hija.

 

EL PROFESOR:​​  ¡Como dejas que Ambrosio visite esta casa!

LA​​ ÚNICA​​ MUJER:​​ Porque me da miedo

 

AMBROSIO:Y lo del hijo del Bachiller de Asís, es que​​ no se enteró lo de ese muchacho. Resulta que el muy picarón le había pedido dinero prestado​​ al Bachiperez, con el argumento de que se había roto la unidad, la unidad del consultorio odontológico; pero lo cierto, es que le quitó​​ el dinero al padre, porque el chulo, el negro​​ culí​​ que trabaja en el burdel de "Santa Ana"​​ se​​ metió​​ en un lío de plata, y como el doctorcito no puede vivir sin que su negrito se lo coja, le quitó el dinero al pobre Bachiperez.​​ 

 

EL PROFESOR:​​  ¿Por qué escuchas todos los chismes de Ambrosio?

LA​​ ÚNICA​​ MUJER:​​ Porque me da miedo.

 

AMBROSIO:¿Y​​ supo que a la novia del club "El Comercio" se la cogieron la noche de la coronación?

 

EL PROFESOR:¿Por qué dejas entrar a Ambrosio a esta casa?​​ 

LA​​ ÚNICA​​ MUJER:​​ Porque me​​ da​​ miedo.

 

AMBROSIO:​​   Pero tampoco era virgen.

 

EL PROFESOR:​​  Tienes que decirle a Ambrosio que no vuelva a esta casa.

LA​​ ÚNICA​​ MUJER: ​​ Me da miedo.​​ 

 

AMBROSIO:  Hasta les mamó el güevo.

 

EL PROFESOR:Es mal ejemplo para mis hijos la presencia de​​ Ambrosio a esta casa.

 

EL NIÑO SE LEVANTA CON UN DIBUJO TERMINADO, SALEN​​ DE ESCENA​​ LAS MODELOS DE "MONTREAL:

AMBROSIO MIRA EL DIBUJO DEL NINO, DICE​​ IRÓNICO.

 

AMBROSIO:​​   Qué talento el de este niño. Va a ser un gran diseñador.

EL PADRE:(ROMPIENDO EL DIBUJO) ¡Voy a llevarte a casa de la Señá Conchita.

 

OSCURO.​​ 

 

 

 

OBRA​​ SÉPTIMA: "SE APLICAN INYECCIONES"

 

EN EL INTERIOR DE LA AUSTERA CASA DE LA SEÑA CONCHITA​​ ESTÁN​​ EL NIÑO Y EL PROFESOR. UNA PEQUEÑA ESTANCIA QUE PARECE UN CUARTO DE BAÑO AMPLIO. HAY UN LAVAMANOS ENANO Y BAJO, SOBRE EL CUAL EL PROFESOR​​ OBLIGA A QUE EL NIÑO PONGA LAS MANOS, QUEDANDO INCLINADO SOBRE EL PEQUEÑO LAVAMANOS. BAJA LOS PANTALONES DEL ATERRADO NIÑO, DEJANDO​​ SUS NALGAS DESCUBIERTO.​​ 

APARECE​​ EN UN ANGULO DE LA CASA LA SEÑA CONCHITA, ELLA VIENE DESNUDA CON UN DELANTAL BLANCO QUE LA CUBRE Y UN TAPABOCAS DE LOS​​ QUE USAN LOS​​ MÉDICOS​​ EN LOS QUIRÓFANOS. TRAE UNA INYECTADORA ENORME.​​ EL PADRE Y EL HIJO FORCEJEAN.

 

EL NIÑO:  No.

EL PROFESOR:Pórtate como un hombre.

EL NIÑO:  No.

EL PROFESOR:Como un macho.

EL NIÑO:  No.

 

SEÑÁ CONCHITA:​​ (CON FUERZA AL PROFESOR) Suéltelo, déjelo, profesor. Yo sé lo que tiene el niño.​​ 

SE PRODUCE UN CAMBIO DE ATMOSFERA. LA SEÑA CONCHITA SE DESTAPA.

SEÑA CONCHITA:Todo se confunde. Es el sol que le achicharra el coco a la gente. Y la resolana creando espejismos, inventando monstruos hasta en los ojos de los niños. Una costumbre: la confusión. Historia​​ patria: Piar y Bolívar no pudieron entenderse. Y más acá, el doctor​​ Siegart, yo soy pariente de él;​​ pobre alemán, sacrificó su​​ vida buscando un elixir alquímico y francmasón que curara todos los males y terminó amargando bebidas de cantineros. El error y el fracaso. No se crea, profesor, yo también tengo mis amarguras. Y no es que me consuelan las desgracias de los demás, pero me sirve para defenderme, porque en este pueblo a toditos los conozco por el culo; y es que un culo no miente. Mire, hay unos que lo traen apretadito, carajo; pero en el entrepliegue, se les descubre la sinvergüenzura. Hay quien lo trae generoso, pero sin abasto. El que lo trae en dos manos por alguna​​ angustia, casi siempre moral. El que se la da de sabroso y lo agarran, mire​​ pues, para prueba. El aseadito por fuera, pero ¡carajo!, sucio por dentro. El que tiene hemorroides y el que lo tiene roto, sollado, de tanto trajín. Hay culos pobres y ricos, culos jóvenes y desinflados; de rajita grande y tipo alcancía… toditos mostrando la verdad. ¡Quién me iba a decir que​​ iba a terminar de “culomántica”.​​ En lo que pelan el culo, ya les conozco la vida… y la inyección que andan buscando. Y yo le juro, profesor: esto es un confesionario, yo les cumplo como una santa, como un ánima, pues. Usted y yo sabemos lo que tiene el niño. Se lo juro, profesor: un culo no miente.

LA ATMOSFERA ES LA DE UNA PESADILLA.

APARECE UN HOMBRE​​ TAMBIÉN​​ DESNUDO, MUSCULOSO, FUERTE, QUE APARTA AL PADRE.​​ 

LA SEÑA CONCHITA DISTRAE AL PADRE, LO APARTA.​​ 

EL HOMBRE DESNUDO AMARRA LAS MANOS DEL NIÑO AL LAVAMANOS. LO SOMETE A LA FUERZA.

LA SEÑA CONCHITA SE ACERCA​​ CON LA GRAN INYECTADORA. EL NIÑO LA VE Y TRATA DE​​ ZAFARSE, PERO LA FUERZA DEL HOMBRE DESNUDO LO SOMETE.

 

SEÑA CONCHITA:Chillas como una niña.

EL NIÑO:  ¡Suéltame!

SEÑA CONCHITA:No hables.

EL NIÑO:  ¡Papá!

SEÑA CONCHITA: Tápale la boca (EL HOMBRE LO HACE CON SU ENORME MANO) Primero sentirás un pinchazo, luego un dolor penetrante se convertirá en escozor. Poco a poco tu cuerpo recuperará la calma, y terminarás por rendirte, resignarte calladamente a la aplicación.

 

LA SEÑA CONCHITA​​ APLICA LA​​ INYECCIÓN​​ AL NIÑO. EL PEQUEÑO SE RETUERCE Y GRITA. LA SEÑA CONCHITA SALE​​ LLEVÁNDOSE​​ AL PROFESOR QUE NO HA QUERIDO MIRAR LA​​ ACCIÓN.

EL HOMBRE DESNUDO Y FUERTE SIGUE SOSTENIENDO​​ AL NIÑO QUE CONTINUA SU LUCHA. EL NIÑO VA​​ CALMÁNDOSE​​ HASTA QUEDAR QUIETO Y EXHAUSTO. EL HOMBRE DESAMARRA SUS​​ MANOS,​​ TAMBIÉN​​ CANSADO POR LA FIERA LUCHA DEL NIÑO. AMBOS QUEDAN EN EL PISO. COMO EL FIN DE UNA​​ VIOLACIÓN.​​ 

 

HOMBRE:  No dirás​​ nada. Si hablas se burlarán de ti. Nadie debe saberlo nunca.

 

EL HOMBRE SALE.​​ ​​ QUEDA EL NIÑO EN ESCENA.

 

EL NIÑO:Yo me robé el cuerpo de Cristo.​​ Yo lo escondí porque lo amaba. ¡Todo ha sido un invento!

 

OSCURO.

 

 

OBRA OCTAVA:​​ "SANTA ANA"

 

SE ESCUCHA​​ MÚSICA​​ DE ROCKOLA, UN BOLERO DONDE​​ SE LE PIDE​​ PERDÓN​​ A DIOS. CUANDO LA​​ LUZ SE HACE SOBRE LA ESCENA, VEMOS A LA SAPOARA, RECOSTADA DE LA ROCKOLA, CON UN TRAGO EN LA MANO, BASTANTE EBRIA.

 

LA SAPOARA:Yo quise ser una actriz, aquí donde​​ ​​ me ves, yo tenía pasta de actriz. Me lo decía el padre José: muchacha,​​ ​​ tienes temperamento,​​ ​​ tienes talento,​​ dedícate​​ a ser actriz.​​ Yo me dediqué, me iba todas las tardes a la vespertina del Cine​​ Royal.​​ (RECORDANDO) El cine de “Santa Ana",​​ ¡qué cine tan viejo, cará!​​ ¡Duro, palo’e​​ cine!​​ El rió se desbordaba y el cine seguía ahí, uno veía doble la película, allá arriba en la pantalla, y abajo​​ en el reflejo del agua que inundaba la platea; pero la gente iba, se sentaban en los espaldares​​ de las butacas de hierro. En ese cine comencé mi carrera, de vespertina en matiné, ahí comencé,​​ pero no a ser una actriz, aquello había quedado​​ lejos. Yo​​ fuí la esclava de Fabiola: Syra. A​​ ​​ me gustaba esa comedia, yo sentía el​​ papel de la crisTÍAna Syra.​​ Fue mi debut y despedida. Me quedé con las ganas de seguir actuando. Mi primera vez yo rezaba y pujaba, sentía aquello como un castigo, un latigazo, un dolor infinito. Hasta que me acostumbré y fui olvidándome de​​ lo santa. Actuaba, fingía, hasta que le agarré el gustico.​​ (PAUSA)​​ Hoy es día de "Santa Ana", eso​​ que​​ están​​ oyendo son los toques de la misa de Santa Ana, no voy a ir a la procesión…

 

ENTRA EN ESCENA LA​​ PROCESIÓN​​ DE SANTA ANA, VARIAS​​ BEATAS ACOMPAÑAN LA IMAGEN DE LA VIRGEN QUE PASEAN EN HOMBROS.​​ HAY NIÑOS VESTIDOS DE​​ ÁNGELES, LLEVAN​​ VELAS EN LAS MANOS.​​ EL CURA PRESIDE LA​​ PROCESIÓN.​​ UN CORO DE VOCES Y REZOS​​ SE CONFUNDEN CON LA VOZ DE​​ LA SAPOARA, QUE​​ SIGUE HABLANDO EN SU BURDEL.

 

LA SAPOARA:Ya me cansé del santoral. Como te estaba contando, ahí en el Royal comencé​​ mi carrera, una puñeta por una entrada.​​ Haciendo puñetas,​​ la mejor puñetera del​​ puerto​​ de​​ Bolívar. Me hice una experta en la puñeta. Yo puñeteaba la vaina de un caletero con una mano, y con la otra me comía las cotufas empapadas de lágrimas​​ porque​​ Greta Garbo se moría en la cama​​ de Margarita.​​ Yo puñeteaba y lloraba. Y aquella hediondez a semen en las​​ manos y en el cine, en las cotufas, en la boca, porque después mamaba, mamaba y veía mi película. Un día le mordí el que te​​ conté a un​​ individuo porque me impresionó​​ la​​ película, lo hice sin culpa,​​ ¡tronco de coñaza!, me pusieron el apodo de "la caribe",​​ “la caimana dulce".​​ ¡Ah!, como me producían nauseas la esperma gruesa de los borrachos.

 

LA SAPOARA MIRA A LA​​ VIRGEN DE SANTA ANA. LE GRITA.

 

LA SAPOARA:​​  Santa Ana es mí patrona, patrona del puerto, del pueblo, del bar de la Sapoara.​​ ¿Qué​​ te parece​​ vieja? La mejor puñetera, la mejor mamadora, la​​ mejor puta de todos los tiempos. Soy una actriz,​​ Anita. ¡Hollywood! Quiero que me prueben en Hollywood. "Los hombres la prefieren putas”, no rubias Marilyn.

EL CURA:(EN LA​​ PROCESIÓN) ¡Y ahora canten todos!​​ 

 

LA PROCESION COMIENZA A CANTAR. PERO LA SAPOARA ENCIENDE NUEVAMENTE LA ROCKOLA.

 

LA SAPOARA:No. No canten​​ oraciones.​​ Guarden la virgen, hoy es día de​​ fiesta. Yo decreto que hoy comienza el carnaval.​​ 

​​ 

SE​​ ESCUCHA LA CANCION:​​ "ELLA SE LLAMA​​ MICAELA”

 

LA SAPOARA: (SIGUE​​ GRITANDO) Mi máscara,​​ denme mi máscara que llegó​​ el carnaval.

 

MUSICA DE CARNAVAL.​​ LAS BEATAS AL QUITARSE LOS MANTOS SON TRANFORMISTAS VESTIDOS​​ DE CARIOCAS.​​ COMIENZA LA FIESTA DEL CARNAVAL MIENTRAS LA​​ SAPOARA SIGUE GRITANDO.

 

LA SAPOARA:Este es un pueblo​​ de mierda. Algún día voy a vengarme de todos ustedes. Voy a ser una actriz, voy​​ a llegar a​​ Hollywood. Todos los machos del puerto van a mirarme en las pantallas de los cines, en​​ las revistas, en los posters, enseñando las tetas, el culo. Mostrando una sonrisa. Una mueca de satisfacción y de deseos. Un ídolo, una diva. Tendré la oportunidad de​​ castigar a todos los que me utilizaron, pervertido,​​ en este mundo de trueques y mercados.​​ Llegó​​ el Carnaval, prestadme una más cara, dadme una máscara que ha llegado el carnaval.

 

LA SAPOARA ESTA ENLOQUECIDA,​​ MÁS​​ AUN EL GRUPO QUE BAILA LA ZAMBA CARIOCA. SE ESCUCHA POR ENCIMA LA OPERA “PAYASO”.​​ 

 

OSCURO.

 

 

OBRA NOVENA:​​ “MARILYN, LA ULTIMA PASIÓN”

 

UN SEGUIDOR DE LUZ HIERE LA OSCURIDAD, CAYENDO SOBRE EL DIRECTOR, SOLO, EN MEDIO DEL ESCENARIO. ESTA DESNUDO.​​ 

 

EL DIRECTOR:Soy un poeta. Soy un artista execrado de​​ la sabiduría y la dignidad. Soy​​ recuerdos. La forma. Lo he comprendido. Se abre el abismo. Sé que está delante de mí y no me puedo detener, ni emprender el vuelo para salvarlo. Me atrae irremediablemente, me pierdo, me extravío. Me he convertido en un fanático. Solo en eso: un fanático de mí mismo.

 

EL DIRECTOR BUSCA EN SUS BOLSILLOS,​​ ESTÁN​​ REPLETOS​​ DE BARBITÚRICOS.​​ CÁPSULAS Y PASTILLAS EMPIEZAN A LLOVER SOBRE SU FIGURA.

EL ACOMPAÑANTE APARECE CON UNA BANDEJA DE PLATA SOBRE LA CUAL UNA COPA DE AGUA Y OTRA CON UN MARTINI SECO Y SU ACEITUNA.

EL DIRECTOR TOMA PASTILLAS​​ INDETENIBLEMENTE Y APURA EL MARTINI.

APARECEN SUS FANTASMAS. LAS TRES​​ TÍAS, LA​​ ÚNICA​​ MUJER, LA HERMANA, LA SAPOARA, LA SEÑA CONCHITA Y AMBROSIO. TODAS VISTEN DE ENFERMERAS. BLANQUÍSIMAS, RÍGIDAS, TOCADAS Y PLANCHADAS.

CANTAN EL “HIMNO A LA ENFERMERA” LETRA DE ANDRES ELOY BLANCO.

​​ PARECEN PEDIRLE QUE DETENGA LA ACCION.

 

EL DIRECTOR:No quiero.​​ 

EL DIRECTOR GIRA SU ROSTRO HACIA OTRO LADO Y APARECEN LOS TRES​​ TÍOS, EL PROFESOR, TODOS ENFERMOS CON PIJAMAS DE HOSPITAL Y CAMISAS DE FUERZA. EL DIRECTOR TAMBIÉN EVITA LA APARICIÓN.

 

EL DIRECTOR:Apártense de mí.

 

EL DIRECTOR SE DIRIGE A OTRO LADO DEL ESCENARIO DONDE APARECEN EL NIÑO, DESNUDO, LLEVANDO ENTRE LAS MANOS UN VESTIDO DE MUJER, BLANCO, DE FALDA SUPERPUESTA DE TUL,​​ UN TRAJE AL ESTILO DE LAS ULTIMAS​​ FOTOGRAFÍAS​​ DE MARILYN MONROE.

 

EL DIRECTOR:Estás aquí.

 

EL NIÑO Y EL ACOMPAÑANTE VISTEN CON EL​​ TRAJE DE TUL AL DIRECTOR. EL NIÑO COMPASIVO VA​​ DÁNDOLE​​ MAS PASTILLAS.

APARECE EL AMANTE, TAMBIEN DESNUDO. BLANCO, CON LA PIEL COMO​​ SI ESTUVIERA MUERTO. TRAE UN TELÉFONO NEGRO ENTRE LAS MANOS.

 

EL DIRECTOR:¿A quién llamo?

ACOMPAÑANTE:​​  No hay a quien llamar.

 

EL DIRECTOR MIRA EN DERREDOR. TODOS LOS PERSONAJES TIENEN UN HILO DE SANGRE QUE CORRE DE SUS LABIOS ABIERTOS. LA ATERRADORA IMAGEN DESAPARECE.EL DIRECTOR QUEDA NUEVAMENTE BAJO LA LUZ DEL SEGUIDOR.

 

EL DIRECTOR:Fe de erratas: ¡me he equivocado!

 

 

OSCURO.​​ ​​ TELÓN​​ FINAL.

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José Simón Escalona

Nace en Ciudad Bolívar, Edo. Bolívar, Venezuela, el 17 de mayo de 1.954. Estudió Arquitectura en la Universidad Simón Bolívar y Artes en el Instituto Pedagógico de Caracas. Inicia su actividad artística como actor en 1.967 y funda el GRUPO THEJA en 1.973, agrupación cuyos éxitos han traspasado nuestras fronteras y en la cual se desempeña como Presidente Fundador y Director Principal.

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