EL PRÍNCIPE CONSTANTE

HACIA LA CELEBRACIÓN DE NUESTRO 50 ANIVERSARIO

“CONSTANCIAS”.

EL TIEMPO

“EL PRÍNCIPE CONSTANTE” encierra en el sugestivo “Leiv Motiv” de nuestra versión, una máxima sobre el tiempo:

Al peso de los años

Lo eminente se rinde

que a lo fácil del tiempo

no hay conquista difícil.

Los años se suceden y aunque pesan sobre lo físico y el ímpetu, traen la gloria de develarnos nuestra propia hechura, uno como una verdad. Es necesario mucho cincel y trabajo constante sobre uno mismo para terminar de esculpir de nuestra roca dura de la infancia y los recuerdos, de la adolescencia y los miedos, de la temprana juventud y los estudios, el hombre que somos y queremos ser.

EL ESPACIO

En Calderón la palabra es escenografía, es ritmo y música, es concepto y poesía. Calderón es inspirador para los artistas (…) Calderón habla, canta, pinta, filosofa y excita los sentidos (…) Calderón es una nueva naturaleza y si “PRÍNCIPE CONSTANTE” pertenece a la verdad del arte, no de la historia. Rebarroco.

LA MUERTE

La muerte es el gran tema de toda mi obra artística. “EL PRÍNCIPE CONSTANTE” es una obra de gran vigor, de ideal de juventud. Don Fernando es la Juventud, entre el amor y la amistad, el valor y el deber. No hay egoísmos, no hay concesiones. Hay conquista, hay constancia. Uno muere como vive.

José Simón Escalona

Fragmentos del escrito para

Programa de mano. 1992.

“VERSIONES”

Calderón es para nosotros un espejo. Imagen, gesto y espíritu que permite reconocernos en una misma duda: la contemporánea.

Su expresión literaria institucionaliza la metáfora castellana, haciendo de nuestro lenguaje un resonador de tonos graves y perpetuos. Calderón ordena y desordena el mundo a través del lenguaje, permitiendo en la representación la apertura de un espacio para lo subversivo.

Reconocernos en este dramaturgo del Siglo de Oro es algo que va más allá de una celebración por los quinientos años de encuentro. Es más bien, entrar en contacto con un proyecto que posee más de dos mil años: lo humano. Calderón se erige como un demiurgo y rompe el tiempo; pasado, presente, futuro, con metáforas de un nuevo poema que toca las mitologías del hombre. Sólo así, podemos entender que una pieza escrita en 1628 nos llame, como si existiera una comunicación única y constante en el hombre; algo primitivo y trascendente que nos identifica a pesar de las épocas.

El Príncipe Constante es esta obra y su versión se erige como necesidad de hacer acto concreto esta especie de comunión.

Esta versión es un intento de mostrar la totalidad de Calderón y por ello hemos partido del respeto. Pero no es un respeto anquilosado, sino más bien placentero por nuestra lengua castellana, su ritmo, su música e incluso su arcaísmo.

En la versión de EL PRÍNCIPE CONSTANTE nada es fortuito, el arte se mueve con lo algebraico. Lo operático, el sentido de la trágico y lo filosófico vibra hacia un punto cercano a la fugacidad.

La obra se levanta pues, como un sonido que presume hacer eco en las paredes de la inquietud, de la duda. Es acercarse al borde o al centro. Es hacer de ese grito un gran silencio.

Frank Spano

Escrito para el Programa de Mano. 1992.

“LA PARTITURA”

Existe en la música de esta obra, un segundo libreto. Un comentario constante sobre personajes y situaciones; basado en la identificación de cada uno con un tema.

Se han utilizado referencias barrocas por la época de Calderón De La Barca, así como medievales y renacentistas, todo visto a través de una óptica del siglo XX.

Como en la ópera, la introducción a cada jornada adelanta los sucesos y su desenlace al mismo tiempo. Todo sonido nos ubica en el espacio geográfico.

La música es un móvil. La electrónica y los sintetizadores se hacen versos.

Adina Izarra

Escrito para el Programa de Mano. 1992.

“CALDERÓN MUSICAL”

Enfrentarse a un clásico siempre requiere un trabajo de filigrana, armar de manera meticulosa cada parte que involucra la puesta en escena. Esta vez, me ha tocado por vez primera interpretar una obra del Siglo de Oro español, al igual que por primera vez abordan un escenario mis compañeros del Taller de Jóvenes Artistas del Theja.

La declamación es uno de los modos de la dicción y el ritmo. El verso se aleja al lenguaje cotidiano y nos lleva hacia la musicalidad del texto pronunciado, lejos, ¡válgame Dios!, de sonar artificialmente recitado. Trabajo difícil, el buen decir. (…) ¿Y cómo se logra esto? Como le oí decir a Cicely Berry, la legendaria maestra de voz y dicción del Royal Shakespeare Company (en un programa de TV por supuesto): “Al verso hay que descifrarlo por imágenes, dándole a cada uno la importancia y justa dimensión que se merece”. O como dijo Louis Jouvet: “Las palabras bien dichas quedan en el corazón de quien las escucha”.

Para nosotros el verso es música, el texto de Calderón es la melodía, así es que podríamos hablar de una gran orquesta de voces humanas que, acompañadas por un maravilloso trabajo de composición musical, nos lleva a presenciar un hermoso espectáculo del grupo THEJA, que quedará en el corazón de los espectadores”.

Julie Restifo

Fragmentos de su escrito para

Programa de Mano. 1992.

“REALISMO E IDEALISMO”

El Príncipe Constante, de Calderón De La Barca, es una pieza ejemplar, cuyo protagonista como un nuevo Job nada problemático, es modelo de caballero cristiano. (…) Don Fernando es el hombre que ha elegido de una vez para siempre la más alta de las libertades, la de morir por la fe que profesa. (…) Es el Rey que lo ha sometido al régimen de opresión quien reconoce justamente, la libertad de su prisionero. La muerte no será sino el último escalón de esta vida ascendente, estribada en la libertad espiritual, que lo sitúa, constantemente, más allá de los límites de la condición humana. El Príncipe Constante es, como todos los santos, el héroe anti trágico por excelencia.

En la obra, su oponente frenético, su rival en la acción, es el Rey. La pasión que domina dicho personaje en su mente es el ensañamiento, el ansia de poder.

Balance de un enfrentamiento donde el bien destruye al mal. Tal es la profundidad conceptual de este drama de Calderón: la elevación del espíritu por encima del materialismo absurdo que envuelve al ser humano.

La redención del justo, frente al pecado abominante.

Don Fernando Gómez

Fragmentos de su escrito para

Programa de Mano. 1992.

“DEL VIAJE HACIA FERNANDO”

En esta pretensión de acercamiento, mi elaborada mentira también romántica, podría reconocerlo un hedonista cualquiera (que soy yo), como otro que, libre del peso del enorme edificio de la contemporaneidad, alza magníficamente una bandera que lleva en cada cara un misterio, y en un alarde divinamente arrogante de ese conocimiento superior que parece intrínseco a los trascendentales, descubre sin asombro, que la vida de los hombres es un círculo de tierra muerta como la luna y que al final (o al principio) nacer y morir son lo mismo, como el placer y el dolor, como la eterna pregunta, la que ese conocimiento no le permite hacerse, la que tiene que ver con los misterios: el amor y la fe.

Luis Fernández

Fragmento de su escrito para

Programa de mano. 1992.

 

“VOCALISE”

“…la Fe no es posesión de todos…”

2da. Tes. 3:2

Hace ya tiempo que venía entre dos aguas. Desde que el dulce veneno de la opera me hiriera – aún no sé si para bien – encontré la puerta que, curiosamente, me conduciría hasta el teatro.

Fueron muchas las experiencias de aprendizaje y reflexión, acumuladas, provenientes de ambos mundos (el de la ópera y el teatro), esto trajo como consecuencia la inquietud de saber ¿qué podía o debía aprender el actor del cantante lírico o viceversa?

Desde mi aparición, como parte del grupo de profesores del V TALLER DE JÓVENES ARTISTAS DEL THEJA, encargada de transmitir esta rareza llamada “técnica Vocal”, que no es otra cosa que llevar a un proceso consciente algo que la naturaleza realiza por sí misma, he vivido momentos extraordinarios con seres humanos que se permitieron aprender algo de mí, ya que la única maestra a mi modo de ver, es nuestra propia capacidad para dejarnos modificar. Por ello considero que lo más importante de este navegar ha sido el mantenerse apegados al proceso creativo con un sentido de verdad y compromiso sabiendo que llegamos a un buen puerto porque tenemos el privilegio de la Fe.

Laura Blanco

Fragmentos de su escrito para

Programa de Mano. 1992.

“LOS 25 DE CHAO”

Eres un hombre de teatro, Chao. Lo escribo ahora deslastrado de mi inaguantable egoísmo. No sólo has sabido dirigir obras y un grupo. No sólo has aprendido a gerenciar – horrendo neologismo – un grupo y un teatro. No sólo has madurado tu rebeldía, sino que has sabido ser amigo. Un amigo. El amigo.

Tu gran triunfo ha sido la amistad, esa amistad tan necesaria para vivir en el arte. Para desvivir del teatro. Tu amor a los demás. Tu amor al “otro”. Y lo saben todos tus amigos y escandalizados estarán los que no te conocen – “¿Amistad en el teatro venezolano?” -. Pues sí, amistad para desencanto de los pitofleros y azuzones del teatro de aldea.

Estos 25 años son un triunfo a tu constancia, son un triunfo de tu fe por la vida y el teatro. Son un triunfo por el amor al hombre y a la amistad que le has entregado a los tuyos.

Javier Vidal

Fragmento de su escrito para

Programa de mano. 1992.

DIRECTOR DE LA PRODUCCIÓN: José Simón Escalona

MAESTRO DE ACTUACIÓN Y DIRECCIÓN: José Simón Escalona

Con la presentación de los integrantes del V TALLER DE JÓVENES ARTISTAS: Frank Spano, Nacho Huett, Emerson Rondón, Alonso Santana, Gabriel Blanco, Marcos Mora, Alfredo Muñoz.

AUSPICIOS: CONSEJO NACIONAL DE LA CULTURA (CONAC)

COLABORADORES: Fundación Cultural José Ángel Lamas, Teatro Teresa Carreño, Ateneo de Caracas, CE.VI.VE. (Centro Vidriero de Venezuela), fundarte, L´Oreal de París, OMNIVISION Multicanal, RCTV. Marte TV, Venezolana de Televisión, VENEVISION.

Mejor Escenografía

MONTAJE EN CELEBRACIÓN DE LOS 25 AÑOS DE ACTIVIDAD ARTÍSTICA DE JOSÉ SIMÓN ESCALONA

TEMPORADA 1992

Director Grupo Theja

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